El 28 de abril de 2025, España vivió un apagón que dejó a gran parte de la Península Ibérica a oscuras. Este evento no solo afectó a la vida cotidiana de millones de ciudadanos, sino que también tuvo un impacto significativo en el uso de energías renovables en el país. Desde entonces, el porcentaje de energía generada a partir de fuentes renovables ha disminuido drásticamente, marcando un cambio en la tendencia que España había mantenido durante años como uno de los líderes en energías limpias dentro de la Unión Europea.
**Cambios en el Mix Energético Español**
Antes del apagón, España se enorgullecía de generar aproximadamente el 65% de su energía a partir de fuentes renovables, un porcentaje que superaba en más de doce puntos la media de la Unión Europea, que se situaba en un 51,8%. Sin embargo, tras el incidente, este porcentaje se redujo al 54% en junio de 2025, según datos de Eurostat. Este descenso ha llevado a que, por primera vez desde la pandemia, la media de la UE supere a la de España en cuanto a la utilización de energías renovables.
La Red Eléctrica de España, tras el apagón, implementó un ‘modo reforzado’ que implicó la inyección de más fuentes de energía no renovable, como el gas natural y la energía nuclear, en un esfuerzo por estabilizar la red eléctrica y evitar futuros apagones. Este cambio en la estrategia energética ha sido una respuesta directa a la crisis, pero también ha generado preocupaciones sobre el futuro de las energías renovables en el país.
A medida que se comparan los datos de este año con los del año anterior, se observa que mientras la media de la UE ha incrementado su uso de energías renovables, España ha visto una reducción de cinco puntos en su aportación de energías limpias. En junio de 2024, el porcentaje de energía renovable en España era del 59,7%, mientras que en junio de 2025 se había reducido al 54,4%. Este cambio drástico plantea interrogantes sobre la capacidad de España para cumplir con sus objetivos de sostenibilidad y transición energética.
**La Energía Solar como Protagonista**
A pesar de la caída general en el uso de energías renovables, un dato positivo ha emergido: la energía solar ha alcanzado un hito histórico al convertirse en la principal fuente de energía en la Unión Europea durante el mes de junio de 2025. Por primera vez, la energía solar representó el 22% del total de la electricidad generada en la UE, superando a otras fuentes como la nuclear y la eólica. Este cambio es significativo, ya que refleja una tendencia creciente hacia la adopción de tecnologías solares en toda Europa.
En España, las fuentes renovables generaron 12.610 GWh en junio de 2025, una cifra que se encuentra por debajo de los 13.560 GWh generados en abril del mismo año. A pesar de esta disminución, la energía solar sigue siendo un componente crucial del mix energético español. En términos de generación eléctrica, casi el 40% de la electricidad producida a partir de fuentes renovables en España proviene de la energía solar, lo que subraya su importancia en la transición hacia un sistema energético más sostenible.
Sin embargo, el hecho de que la energía solar haya crecido en un contexto de reducción general del uso de energías renovables plantea preguntas sobre la sostenibilidad a largo plazo de esta tendencia. La dependencia de fuentes no renovables para estabilizar la red eléctrica podría obstaculizar el avance hacia un futuro más verde y sostenible.
**Comparativa con Portugal y el Resto de Europa**
El apagón no solo afectó a España, sino que también tuvo repercusiones en Portugal, donde el uso de energías renovables cayó del 91,7% en abril al 80,4% en junio. Este descenso significativo refleja la vulnerabilidad de ambos países a las crisis energéticas y la necesidad de diversificar sus fuentes de energía para garantizar un suministro estable y sostenible.
Al observar el panorama europeo, se puede notar que las principales potencias han incrementado su aportación de energía solar, hidráulica y eólica. Por ejemplo, la media de la UE en junio de 2025 se situó en un 54,7% de uso de energías renovables, un aumento respecto al 51,8% del año anterior. Este crecimiento en el uso de energías limpias en otros países europeos contrasta con la reducción en España, lo que podría tener implicaciones para la competitividad del país en el ámbito energético.
**Desafíos y Oportunidades para el Futuro**
El cambio en el mix energético español plantea una serie de desafíos y oportunidades. Por un lado, la reducción en el uso de energías renovables podría dificultar el cumplimiento de los objetivos climáticos establecidos por el gobierno español y la Unión Europea. Por otro lado, la creciente adopción de la energía solar presenta una oportunidad para revitalizar el sector de las energías limpias en el país.
La transición hacia un sistema energético más sostenible requerirá un enfoque integral que incluya inversiones en infraestructura, investigación y desarrollo de nuevas tecnologías, así como políticas que fomenten la adopción de energías renovables. Además, es crucial que España y Portugal trabajen juntos para fortalecer su red eléctrica y garantizar un suministro energético seguro y sostenible para el futuro.
En resumen, el apagón de abril de 2025 ha tenido un impacto significativo en el uso de energías renovables en España, llevando a una reducción en su porcentaje de generación. Sin embargo, la energía solar ha emergido como un pilar fundamental en el mix energético, ofreciendo una vía para la recuperación y el avance hacia un futuro más sostenible. La clave estará en cómo el país maneje estos cambios y aproveche las oportunidades que se presentan en el camino hacia la transición energética.