La revolución tecnológica que estamos viviendo ha traído consigo un cambio profundo en el mercado laboral, especialmente en el ámbito de la inteligencia artificial (IA). A medida que nos acercamos a 2025, se hace evidente que los empleos tecnológicos están cada vez más ligados a esta tecnología emergente. Un reciente informe del AI Workforce Consortium, liderado por importantes empresas del sector, revela que siete de cada diez puestos de trabajo en el ámbito tecnológico están relacionados directamente con la IA. Este fenómeno no solo afecta a los ingenieros de machine learning o a los expertos en procesamiento de lenguaje natural, sino que también está transformando la manera en que las empresas y los trabajadores perciben su futuro profesional.
La necesidad de habilidades humanas en un entorno tecnológico
En la actualidad, no basta con tener conocimientos técnicos. Las empresas buscan profesionales que no solo sepan programar o manejar datos, sino que también posean habilidades interpersonales como la comunicación, la colaboración y el liderazgo. En un entorno de innovación constante, estas habilidades son esenciales para el éxito. Ryan Oakes, de Accenture, enfatiza que es fundamental contar con una fuerza laboral que no solo esté capacitada en tecnologías avanzadas, sino que también esté preparada para generar confianza y construir soluciones que la sociedad pueda adoptar sin temor.
La pregunta que muchas organizaciones se hacen es cómo preparar a su personal para esta ola de cambios que apenas comienza. Himanshu Palsule, CEO de Cornerstone, señala que la cultura de aprendizaje y adaptabilidad será lo que determine el éxito o el fracaso de las empresas en este nuevo contexto. La formación continua se convierte, por tanto, en un pilar fundamental para enfrentar los desafíos que presenta la IA.
El auge de las habilidades híbridas en el mercado laboral
Un aspecto destacado en el informe es que el 78% de los empleos tecnológicos analizados en los países del G7 ya requieren conocimientos relacionados con la IA. Este impacto no se limita a los programadores, sino que se extiende a sectores tan diversos como la salud, la educación, las finanzas y las telecomunicaciones. Además, áreas como la gobernanza ética y la seguridad en IA han visto un aumento en su demanda de más del 100% en el último año.
Francine Katsoudas, responsable de personas y políticas en Cisco, resume esta tendencia al afirmar que la IA abre nuevas oportunidades, pero el verdadero diferenciador será la capacidad de combinar la experiencia técnica con habilidades humanas como la colaboración y el liderazgo. Esto implica que los profesionales deben ser capaces de adaptarse y aprender continuamente para mantenerse relevantes en un mercado laboral en constante evolución.
Ciudades que lideran la transformación digital
El informe también destaca las ciudades que están a la vanguardia de esta transformación digital. Silicon Valley continúa siendo el epicentro, con un incremento del 156% en el número de empleados vinculados a la IA en el último año. Londres y Toronto siguen de cerca, mientras que ciudades como Manchester, Lyon y Vancouver comienzan a emerger como nuevos polos tecnológicos que concentran talento y oportunidades.
Este fenómeno no solo se limita a la creación de empleos, sino que también está impulsando un cambio en la forma en que las empresas operan y se relacionan con sus empleados. La digitalización y la automatización están redefiniendo los roles y responsabilidades, lo que a su vez exige una mayor flexibilidad y adaptabilidad por parte de los trabajadores.
Recursos para la capacitación y el desarrollo profesional
Con el objetivo de preparar a la fuerza laboral para estos cambios, el AI Workforce Consortium se ha propuesto metas ambiciosas, como capacitar a 95 millones de personas en la próxima década. Para ello, han desarrollado un manual de estrategias, una base de datos con más de 200 cursos prácticos y un glosario que busca estandarizar el lenguaje de las habilidades relacionadas con la IA. La idea es democratizar el acceso al conocimiento y reducir la brecha entre la transformación tecnológica y la capacidad de las personas para adaptarse a ella.
La realidad de la IA generativa
Si en 2024 se hablaba del impacto de la IA generativa como una promesa, en 2025 ya se ha convertido en una realidad palpable. Las empresas tecnológicas que antes dudaban en adoptar esta tecnología ahora se ven obligadas a integrarla en sus operaciones. Los trabajadores, por su parte, descubren que su empleabilidad depende tanto de aprender nuevas herramientas como de fortalecer su lado más humano.
Lisa Gevelber, de Google, resume esta situación al afirmar que las habilidades en IA son esenciales para el empleo actual, pero también es crucial que todos tengan la oportunidad de prosperar en esta nueva era. El gran desafío no radica únicamente en la tecnología, sino en cómo las personas logran adaptarse y crecer junto a ella. En este contexto, la formación continua y el desarrollo de habilidades híbridas se presentan como elementos clave para el éxito en el futuro laboral.