Las recientes lluvias en la región de les Terres de l’Ebre, Tarragona, han generado una serie de alertas y medidas de seguridad por parte de la Generalitat. La consellera de Interior y Seguridad Pública, Núria Parlon, ha declarado que lo «peor» del episodio de lluvias ya ha pasado, aunque se mantiene la vigilancia ante posibles incidencias. Esta situación ha llevado a la activación de protocolos de emergencia y a la coordinación de diferentes cuerpos de seguridad y emergencias.
### Evaluación de la Situación Meteorológica
La previsión meteorológica indica que la perturbación que ha afectado a Cataluña se está alejando, lo que ha permitido que Protección Civil comience a cerrar los avisos de alerta. Durante una rueda de prensa, Parlon estuvo acompañada por expertos del Servei Meteorològic de Catalunya, quienes confirmaron que, aunque las lluvias han sido intensas, no se han reportado incidentes graves en términos de daños personales o materiales. Sin embargo, se ha enfatizado la importancia de mantener la precaución, especialmente en áreas propensas a inundaciones.
Desde el inicio de las lluvias, se han registrado acumulaciones significativas de precipitación. En Amposta, por ejemplo, se ha alcanzado un récord de 272 litros en 30 años, lo que ha llevado a la activación de medidas de emergencia. Otros municipios también han reportado cifras elevadas, como Els Alfacs con 172 litros y L’Aldea con 128 litros. La intensidad de las lluvias ha sido notable, con picos de hasta 53 litros por metro cuadrado en 30 minutos en Amposta.
La situación ha llevado a la creación de un Comité Técnico, presidido por el presidente Salvador Illa, para evaluar continuamente el desarrollo de las condiciones meteorológicas y su impacto en la población. Este comité se reunirá nuevamente para realizar una valoración final de la situación y determinar si se pueden levantar las alertas.
### Impacto en Infraestructuras y Movilidad
Las lluvias han causado cortes en varias carreteras de la región, lo que ha dificultado el desplazamiento de los ciudadanos. Las vías afectadas incluyen la C-12 de Amposta a Tortosa y la TP-3311 entre Santa Bàrbara y La Sénia. La N-340 también ha visto alteraciones en su tráfico, aunque se ha habilitado un paso alternativo por Amposta. Las autoridades han recomendado el uso de la AP-7, que ha demostrado ser más resistente a las condiciones adversas.
Los Bomberos de la Generalitat han intensificado su dispositivo de respuesta, trasladando recursos de regiones no afectadas al Parc d’Amposta. Este parque se ha convertido en un centro de mando para coordinar esfuerzos de rescate y asistencia. Equipos especializados en rescate subacuático y de montaña han sido desplegados, junto con un helicóptero para operaciones de emergencia.
La situación actual en Tarragona es un recordatorio de la importancia de la preparación ante fenómenos meteorológicos extremos. Las autoridades han instado a la población a mantenerse informada y a seguir las recomendaciones de seguridad, especialmente en áreas de riesgo. La colaboración entre diferentes cuerpos de seguridad y emergencias ha sido crucial para manejar la crisis de manera efectiva, y se espera que la situación continúe mejorando a medida que las condiciones meteorológicas se estabilicen.