Mari Boya ha demostrado ser uno de los talentos más prometedores del automovilismo español, consolidándose en la segunda posición del Campeonato FIA Fórmula 3 tras su destacada actuación en el Gran Premio de Hungría. Este joven piloto, que representa a Aston Martin, ha captado la atención de aficionados y expertos por su habilidad y determinación en la pista. Con la próxima cita en Monza, donde buscará asegurar su subcampeonato, la carrera de Boya se perfila como una de las más emocionantes del automovilismo actual.
### Ascenso en la FIA Fórmula 3
Desde su debut en monoplazas en 2020, Mari Boya ha ido escalando posiciones en el mundo del automovilismo. Su trayectoria comenzó en el karting, donde destacó tanto a nivel nacional como internacional. En 2020, logró el subcampeonato en la F4 España y la Eurocopa-3, lo que le abrió las puertas para competir en la FIA Fórmula 3 con el equipo Campos Racing desde 2023. En esta categoría, Boya ha demostrado su valía al conseguir varios podios, incluyendo una victoria en Silverstone y un notable segundo lugar en el Gran Premio de Hungría.
El fin de semana en Budapest fue crucial para el piloto ilerdense. Comenzó con una destacada actuación en los entrenamientos libres, donde se posicionó entre los diez primeros, y continuó su buen rendimiento en la clasificación, logrando un impresionante segundo lugar, a solo 8 milésimas del poleman. En la Carrera Sprint, aunque partió desde la undécima posición, su habilidad le permitió avanzar rápidamente y finalizar séptimo, lo que le dio impulso para la carrera principal.
En la carrera principal, las condiciones de pista mojada presentaron un desafío adicional. A pesar de esto, Boya partió desde la segunda posición y luchó codo a codo con el líder del campeonato, el brasileño Rafael Câmara. Aunque no pudo evitar la victoria de Câmara, su segundo puesto le permitió escalar al segundo lugar en la clasificación general del campeonato, lo que es un gran logro considerando la competencia feroz en la F3.
### El Desafío de Monza
Con el Gran Premio de Monza a la vista, Mari Boya se prepara para una de las pruebas más emblemáticas del automovilismo mundial. Aunque ya no tiene opciones de pelear por el título, su objetivo es claro: mantener la segunda posición en el campeonato. En sus declaraciones tras la carrera en Hungría, Boya expresó su satisfacción por el ritmo mostrado y su ascenso en la clasificación, aunque también reconoció que le hubiera gustado llegar a Monza con opciones de título. «Toca rematar la temporada con un buen resultado en la última prueba y con el subcampeonato. Vamos a por ello», afirmó con determinación.
La carrera en Monza no solo será un reto para Boya, sino también una oportunidad para demostrar su talento en un circuito que es conocido por su historia y su exigencia. La pista italiana es famosa por sus largas rectas y curvas rápidas, lo que requiere de una combinación de velocidad y estrategia. La experiencia adquirida en las carreras anteriores, junto con el apoyo de su equipo, será fundamental para que Boya logre un buen resultado.
Aston Martin, al confiar en Boya como parte de su Academia, ha apostado por un futuro brillante en el automovilismo. La escudería ha estado atenta a su progreso y ha visto en él un potencial que podría llevarlo a las grandes ligas de la Fórmula 1 en un futuro cercano. La presencia de pilotos españoles en la Fórmula 1 ha sido histórica, y Boya podría ser el próximo en seguir los pasos de leyendas como Fernando Alonso y Marc Márquez.
El automovilismo español ha vivido un resurgimiento en los últimos años, y la figura de Mari Boya es un claro ejemplo de ello. Con su talento, dedicación y el respaldo de Aston Martin, el joven piloto está en camino de convertirse en un referente del deporte. La próxima carrera en Monza será una prueba decisiva no solo para su posición en el campeonato, sino también para su carrera a largo plazo en el automovilismo profesional.
A medida que se acerca la fecha de la carrera, los aficionados estarán atentos a cada movimiento de Boya, esperando que pueda consolidar su posición y, por qué no, soñar con un futuro en la Fórmula 1. La historia del automovilismo está llena de sorpresas, y Mari Boya podría ser el próximo capítulo emocionante en esta narrativa.