La situación de Rolando Mandragora en la Fiorentina ha generado un intenso tira y afloja entre el club italiano y el Real Betis. El centrocampista napolitano se ha convertido en un objetivo clave para el equipo español, que busca reforzar su plantilla tras la salida de Johnny Cardoso. Sin embargo, la negociación se ha complicado debido a las intenciones de la Fiorentina de retener al jugador y ofrecerle una renovación que lo vincule al club hasta 2028.
### La Estrategia del Betis ante la Competencia
El Real Betis ha mostrado un interés claro en incorporar a Mandragora, un futbolista que se destaca por su capacidad en el centro del campo, jugando principalmente como mediocampista central. La primera oferta presentada por el Betis fue de aproximadamente cuatro millones de euros, una cifra que fue rechazada de inmediato por la Fiorentina. Este rechazo no solo refleja la valoración que el club italiano tiene del jugador, sino también su deseo de mantenerlo en sus filas.
La Fiorentina, consciente de la calidad de Mandragora y su potencial para contribuir al equipo, ha decidido actuar con firmeza. Según informes de medios italianos, el club ha convocado al jugador para discutir una posible renovación de contrato que lo mantendría en el equipo por tres años más, hasta 2028. Este movimiento no solo busca asegurar la continuidad del futbolista, sino también aumentar su valor en el mercado, lo que podría resultar en un traspaso más lucrativo si finalmente decide dejar el club.
La situación contractual de Mandragora es interesante. Su contrato actual expira en 2026, pero existe una cláusula que le permitiría extenderlo automáticamente por un año adicional si juega la mitad de los partidos en la próxima temporada. Esto le da a la Fiorentina una ventaja considerable en la negociación, ya que pueden esperar un año más antes de considerar su salida, siempre y cuando el jugador cumpla con los requisitos establecidos.
### Alternativas en el Mercado
Ante la negativa de la Fiorentina, el Real Betis ha comenzado a explorar otras opciones en el mercado de fichajes. La dirección deportiva del club, liderada por Manu Fajardo y Ramón Alarcón, ha estado en contacto con varios jugadores que podrían ser alternativas viables a Mandragora. Entre los nombres que se han mencionado se encuentran Jacobo Ramón y Aarón Anselmino, quienes podrían ser considerados para reforzar el centro del campo del Betis si la operación con Mandragora no se concreta.
El Betis está consciente de que el tiempo es un factor crucial en este tipo de negociaciones. Con la ventana de transferencias abierta, el club espera que la situación se resuelva en un plazo no mayor a diez días. Esto les permitirá planificar adecuadamente su plantilla para la próxima temporada, independientemente de si logran fichar a Mandragora o no.
La presión está sobre el Betis para actuar rápidamente, ya que otros clubes también están atentos a la situación del mediocampista. La Fiorentina, por su parte, ha dejado claro que no está dispuesta a negociar a la baja y que su intención es mantener a Mandragora en el equipo, lo que complica aún más las posibilidades de un acuerdo.
En este contexto, el Real Betis se enfrenta a un dilema: seguir insistiendo en la negociación por Mandragora, arriesgándose a perder tiempo valioso en su búsqueda de refuerzos, o diversificar sus esfuerzos y centrar su atención en otros jugadores que puedan aportar al equipo. La decisión que tomen en los próximos días será crucial para definir su estrategia de fichajes y su rendimiento en la próxima temporada.
La situación de Mandragora es un reflejo de las complejidades del mercado de fichajes, donde las decisiones deben tomarse con rapidez y precisión. La Fiorentina, al buscar asegurar su futuro, y el Betis, al intentar reforzar su plantilla, están inmersos en un juego de estrategias que podría tener un impacto significativo en sus respectivas temporadas.