En el contexto actual, donde los equipos financieros enfrentan desafíos sin precedentes, la inteligencia artificial (IA) se presenta como una herramienta crucial para la transformación y optimización de procesos. Sin embargo, la efectividad de esta tecnología se ve comprometida por la proliferación de herramientas digitales desconectadas, lo que plantea un dilema para los responsables de la toma de decisiones en el ámbito financiero.
### La IA como Motor de Empoderamiento Financiero
Un reciente estudio revela que un 79% de los CFOs en España que utilizan la inteligencia artificial de manera intensiva se sienten capacitados para generar un impacto significativo en sus organizaciones. Este porcentaje contrasta notablemente con el 60% de aquellos que no emplean esta tecnología. Este empoderamiento se debe a la capacidad de la IA para liberar a los CFOs de tareas operativas, permitiéndoles concentrarse en decisiones estratégicas que pueden transformar sus empresas.
Sin embargo, la realidad es más compleja. Un 55% de los CFOs españoles ha asumido responsabilidades que van más allá de sus funciones tradicionales, abarcando áreas como recursos humanos (46%), ciberseguridad (43%) y contratación (41%). Este cambio en el rol de los CFOs se produce en un contexto macroeconómico incierto, donde el 71% de ellos reporta niveles de presión sin precedentes. Además, un 32% indica que actualmente realizan más tareas administrativas que hace cinco años, lo que sugiere que la carga de trabajo ha aumentado considerablemente.
La inteligencia artificial tiene el potencial de aliviar esta presión, pero su implementación efectiva depende de la integración de las herramientas digitales utilizadas en las empresas. La falta de integración puede llevar a ineficiencias significativas, lo que a su vez afecta la capacidad de los CFOs para tomar decisiones informadas y rápidas.
### Desafíos de la Integración en el Uso de Herramientas Digitales
A pesar de las promesas de agilidad que ofrece la inteligencia artificial, un 52% de los responsables financieros considera que sus empresas utilizan demasiadas herramientas, lo que genera ineficiencias operativas. En promedio, los CFOs trabajan con siete plataformas diferentes, y un alarmante 38% de estas herramientas están mal o nada integradas. Esto obliga a los equipos a perder tiempo valioso navegando entre sistemas desconectados, lo que se traduce en una pérdida de 126 horas al año por persona, equivalente a más de tres semanas laborales.
La integración se erige como un factor crítico para el éxito de la inteligencia artificial en el ámbito financiero. El estudio indica que el 79% de los usuarios intensivos de IA consideran que la integración entre herramientas es clave para maximizar su efectividad. Este porcentaje disminuye al 73% entre los usuarios ocasionales y al 65% entre aquellos que rara vez utilizan IA. Esto pone de manifiesto la necesidad de que las empresas evalúen críticamente su conjunto de herramientas y busquen soluciones que fomenten una integración fluida.
Álvaro Dexeus, director para el sur de Europa de Pleo, enfatiza que en el panorama actual, la agilidad y la capacidad de tomar decisiones rápidas y fundamentadas son esenciales. Sin embargo, los equipos financieros no solo enfrentan el desafío de la cantidad de herramientas que utilizan, sino también la mala integración de estas. La inteligencia artificial tiene la capacidad de procesar datos y extraer conclusiones a una velocidad superior a la humana, pero solo puede cumplir su promesa si está completamente integrada en el ecosistema digital de la empresa.
Los líderes financieros deben estar preparados para evaluar de manera crítica la pila de herramientas que utilizan sus equipos. Es fundamental asegurarse de que estas herramientas realmente contribuyan a la agilidad y precisión del negocio. La falta de integración no solo afecta la eficiencia operativa, sino que también puede limitar la capacidad de los CFOs para aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece la inteligencia artificial.
En resumen, la inteligencia artificial se presenta como un aliado poderoso para los CFOs, pero su éxito depende en gran medida de la integración de las herramientas digitales utilizadas en las empresas. A medida que los equipos financieros continúan enfrentando desafíos en un entorno cambiante, la capacidad de adaptarse y optimizar procesos a través de la tecnología será clave para su éxito futuro.