En un acto de descontento político, varios alcaldes y alcaldesas del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en Granada han decidido no asistir a la recepción institucional organizada por la Diputación Provincial, en el marco de la Feria del Corpus. Esta decisión se fundamenta en lo que consideran un «trato discriminatorio» hacia sus municipios por parte del presidente de la Diputación, Francisco Rodríguez, del Partido Popular (PP). La secretaria de Política Municipal del PSOE de Granada, María José Sánchez, ha sido la portavoz de esta protesta, señalando que la falta de atención equitativa hacia los diferentes municipios de la provincia es inaceptable.
La Feria del Corpus es un evento significativo en Granada, donde se celebran diversas actividades culturales y festivas. Sin embargo, la controversia ha surgido debido a la percepción de que los recursos destinados a las festividades no se distribuyen de manera justa. Según Sánchez, el presidente de la Diputación ha priorizado la financiación de eventos en la capital, dejando a los pueblos más pequeños sin el apoyo necesario para sus propias celebraciones. «El año pasado, la Diputación gastó casi 210.000 euros en actuaciones musicales en la caseta municipal del Ayuntamiento de Granada, mientras que los pueblos no reciben ninguna ayuda para sus fiestas patronales», argumentó Sánchez.
La situación ha generado un clima de tensión entre los diferentes partidos políticos en la provincia. Los alcaldes socialistas han expresado su frustración al ver que sus necesidades y las de sus comunidades no son atendidas adecuadamente. «No todos los municipios reciben la misma atención», ha afirmado Sánchez, quien también es alcaldesa de Albuñol. Esta disparidad en el tratamiento de los municipios ha llevado a los socialistas a cuestionar la equidad en la gestión de recursos públicos por parte de la Diputación.
El descontento no solo se limita a la falta de recursos económicos, sino que también se extiende a la percepción de que el presidente de la Diputación no escucha las necesidades de los pueblos. Los alcaldes socialistas han reclamado un trato más justo y equitativo, argumentando que todos los municipios, independientemente de su tamaño, deberían recibir el mismo nivel de atención y apoyo por parte de la institución provincial. «Rodríguez ha decidido dar la espalda a nuestros pueblos, no escucha sus necesidades y desatiende proyectos que son fundamentales para su desarrollo», ha añadido Sánchez.
La decisión de no asistir a la recepción institucional es un acto simbólico que busca visibilizar la problemática que enfrentan los municipios más pequeños. Los alcaldes socialistas consideran que no hay razones para participar en un evento que no representa a todos por igual. Esta protesta se enmarca en un contexto más amplio de tensiones políticas en Andalucía, donde las diferencias entre los partidos y las luchas por el poder local son cada vez más evidentes.
La respuesta del PP ante estas acusaciones ha sido defensiva, argumentando que la gestión de recursos es compleja y que se deben priorizar ciertos eventos por su relevancia cultural y social. Sin embargo, los socialistas sostienen que esta justificación no es suficiente y que es necesario un cambio en la forma en que se distribuyen los recursos entre los municipios.
La situación en Granada refleja un problema más amplio que afecta a muchas regiones de España, donde las diferencias entre las áreas urbanas y rurales a menudo se traducen en desigualdades en el acceso a recursos y servicios. Los alcaldes socialistas han hecho un llamado a la unidad y a la colaboración entre todos los municipios para garantizar que se escuchen sus voces y se atiendan sus necesidades. La falta de atención a los pueblos más pequeños no solo afecta a sus festividades, sino que también tiene un impacto en su desarrollo económico y social.
En este contexto, la protesta de los alcaldes socialistas en Granada se convierte en un símbolo de la lucha por la equidad y la justicia en la gestión pública. A medida que se acercan las elecciones, estas tensiones políticas podrían intensificarse, y es probable que la distribución de recursos y la atención a las necesidades de los municipios continúen siendo temas candentes en el debate político local. La respuesta de la Diputación y del PP a esta situación será crucial para determinar el futuro de las relaciones entre los diferentes municipios de la provincia y la percepción de la ciudadanía sobre la equidad en la gestión de los recursos públicos.