Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía, ha compartido su visión sobre los desafíos económicos actuales en una reciente entrevista. A sus 82 años, el economista estadounidense, conocido por su crítica a la globalización neoliberal, ha abordado temas cruciales como las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, así como el papel de Europa en este contexto. En un mundo marcado por la incertidumbre, Stiglitz advierte sobre la necesidad de que Europa adopte una postura firme en sus negociaciones con el presidente estadounidense, Donald Trump.
Las tensiones geopolíticas y económicas han aumentado en los últimos años, y Stiglitz identifica a Trump como uno de los principales riesgos para la estabilidad económica global. Según él, la guerra comercial entre Estados Unidos y China es solo la punta del iceberg. «Washington está muy enojado porque Pekín está restringiendo las exportaciones a EE.UU., lo que aumenta la presión sobre la economía mundial», señala. Además, la ambigüedad de la postura estadounidense respecto a la invasión de Ucrania y la inestabilidad en Oriente Medio son factores que contribuyen a un clima de incertidumbre.
### La Globalización en Tiempos de Crisis
Stiglitz también reflexiona sobre el futuro de la globalización en un mundo cada vez más fragmentado. A pesar de las críticas y el deseo de algunos países de desvincularse de la globalización, el economista sostiene que la interdependencia económica es innegable. «No podemos retirarnos por completo de la globalización. Estados Unidos ha descubierto que depende de las tierras raras y los imanes chinos. Aunque puede desarrollar estas capacidades internamente, le llevará años», explica.
El economista advierte que las actuales tensiones entre Washington y Pekín están desestabilizando las cadenas de suministro globales. Tanto Estados Unidos como Europa dependen en gran medida de los productos que llegan de Taiwán, lo que subraya la necesidad de reestructurar la economía mundial para hacerla más resiliente ante los riesgos geopolíticos. Stiglitz enfatiza que es una fantasía pensar que se puede acabar con la globalización, ya que la realidad es que los países están interconectados de maneras complejas.
### Estrategias de Negociación para Europa
En cuanto a las negociaciones de aranceles entre Estados Unidos y Europa, Stiglitz ofrece un consejo claro: Europa debe adoptar una postura firme, similar a la que ha tomado China. «Mi consejo es que haga lo que hizo China. Ser duro, reconocer que estás tratando con alguien que es caótico y que probablemente al final cederá de todos modos. Cuando más enérgico seas, más probabilidades tendrás de triunfar», afirma. Esta estrategia, según Stiglitz, es crucial para evitar que Trump aproveche cualquier signo de debilidad.
El economista también critica la política comercial errática de Trump, sugiriendo que responde más a la improvisación que a un plan estratégico. «Trump piensa que el déficit comercial de EE.UU. es el reflejo de que otros países se están aprovechando. Su mentalidad es que, como es el mejor país, todos deberían querer sus productos», dice Stiglitz, subrayando que esta visión va en contra de los principios económicos.
Además, Stiglitz aborda la posibilidad de implementar políticas industriales nacionales sin caer en el proteccionismo. Asegura que algunas políticas pueden fomentar la producción nacional sin excluir completamente las importaciones. Por ejemplo, menciona la ley de chips y la Inflation Reduction Act (IRA) como intentos de fortalecer la capacidad de producción estadounidense sin cerrar las puertas al comercio internacional.
La situación económica en España también fue un tema de discusión. Stiglitz señala que, a pesar de la reducción del desempleo, el país enfrenta un problema estructural con una de las tasas de paro juvenil más altas de la Unión Europea. Propone que España debería estudiar sistemas educativos de otros países que faciliten la transición de los jóvenes al mercado laboral, adaptando las mejores prácticas a su contexto.
Por último, el economista destaca la creciente desigualdad en el acceso a la vivienda, un problema que afecta a muchos países, no solo a España. La falta de innovación en la industria de la construcción ha llevado a un aumento en los precios de la vivienda, lo que agrava las desigualdades de ingresos. Stiglitz sugiere que es necesario analizar las cuestiones sistémicas que contribuyen a este fenómeno, en lugar de centrarse únicamente en las manifestaciones del problema.
La visión de Stiglitz sobre la economía global y el papel de Europa en ella es un llamado a la acción. En un mundo lleno de incertidumbres, su enfoque pragmático y su insistencia en la necesidad de una negociación firme pueden ofrecer una guía valiosa para los líderes europeos en los tiempos difíciles que se avecinan.