La situación laboral en las plantas de Bridgestone en España se ha vuelto crítica, con la reciente convocatoria de huelgas por parte de los trabajadores de la fábrica de Basauri. Esta medida de protesta surge en respuesta a la propuesta de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría a un total de 566 empleados, distribuidos entre las fábricas de Puente San Miguel y Basauri. Los sindicatos han manifestado su firme oposición a esta decisión, argumentando que no hay justificación suficiente para llevar a cabo despidos masivos.
### Demandas de los Sindicatos
Los representantes de los trabajadores han exigido la retirada inmediata del ERE, argumentando que la información proporcionada por la empresa no respalda la necesidad de reducir la plantilla. Durante la última reunión de negociación, celebrada en Basauri, los sindicatos presentaron su postura, destacando que los datos ofrecidos por Bridgestone no demuestran una crisis productiva o organizativa que justifique los despidos. En su comunicado, los sindicatos subrayaron que la implementación de estas medidas podría poner en peligro la viabilidad futura de las plantas.
Los sindicatos han solicitado un cambio radical en la actitud de la dirección de la empresa, así como la elaboración de un plan de viabilidad que asegure el futuro de las fábricas. Hasta el momento, la dirección no ha mostrado disposición para redactar dicho plan, lo que ha generado un clima de desconfianza entre los trabajadores. Además, los sindicatos han denunciado que la empresa ha incumplido promesas previas, como la de mantener reuniones con la dirección europea de Bridgestone, lo que ha llevado a un aumento de la tensión en las relaciones laborales.
### Movilizaciones y Respuesta de los Trabajadores
La respuesta de los trabajadores ha sido contundente, con una participación activa en las huelgas y movilizaciones convocadas. Los sindicatos han expresado su agradecimiento por el compromiso cívico de los empleados, quienes han mostrado su disposición a continuar la lucha por sus derechos laborales. En este contexto, han advertido a la dirección de la empresa sobre la prohibición de interrogar a los trabajadores acerca de su participación en las huelgas, señalando que cualquier intento de represalia será denunciado ante las autoridades competentes.
En un esfuerzo por fortalecer su posición, los sindicatos han enviado una carta a la dirección de Bridgestone en Bruselas, en la que acusan a la multinacional de no valorar los sacrificios realizados por los trabajadores y sus familias en los últimos años. En esta comunicación, se hace un llamado a las instituciones públicas para que intervengan y ayuden a evitar el cierre de las plantas, que representan un legado histórico en el tejido industrial de sus respectivas comarcas. Los sindicatos han instado a la empresa a entablar una negociación seria y equitativa, buscando soluciones que beneficien a los trabajadores en lugar de priorizar los intereses de los accionistas.
El calendario de negociaciones se ha establecido con varias reuniones programadas para el mes de abril y principios de mayo, donde ambas partes se volverán a encontrar para discutir el expediente de despido. La situación sigue siendo tensa, y los trabajadores esperan que la dirección de Bridgestone reconsidere su postura y busque alternativas que eviten despidos traumáticos.
El conflicto en Bridgestone no solo refleja las tensiones laborales en el sector industrial, sino que también pone de manifiesto la necesidad de un diálogo constructivo entre la dirección y los trabajadores. La resolución de este conflicto será crucial no solo para los empleados afectados, sino también para el futuro de las plantas en Basauri y Puente San Miguel, que son fundamentales para la economía local y el empleo en la región.