El nombre de Begoña Gómez ha vuelto a ser mencionado en el contexto de una investigación judicial relacionada con el rescate de Air Europa, un asunto que ha generado controversia y especulaciones en los medios de comunicación. En un reciente informe de la Unidad Central Operativa (UCO), se hace referencia a un mensaje que sugiere que Gómez pudo haber tenido algún tipo de implicación en el proceso de rescate, lo que ha llevado a la oposición a cuestionar su papel y el de su esposo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Durante una visita oficial a China, Sánchez fue interrogado por periodistas sobre estas acusaciones. Con firmeza, el presidente negó cualquier implicación de su esposa en el rescate de la aerolínea, afirmando: «No, en absoluto». Esta declaración se produce en un momento en que el informe de la UCO ha reavivado el interés por el caso, que ya había sido objeto de atención mediática en el pasado.
El mensaje que ha suscitado la controversia fue enviado por Víctor de Aldama a Koldo García, en el que se menciona que «Hidalgo está jodido» y se hace alusión a la necesidad de contactar a Begoña. Este tipo de comunicaciones ha llevado a algunos a insinuar que Gómez podría haber actuado como una «conseguidora» en el proceso de rescate, una acusación que ha sido rechazada tanto por ella como por su esposo.
Desde la Moncloa, se ha respaldado la versión de Sánchez, asegurando que el expediente del rescate de Globalia está «limpio de polvo y paja» y que se han realizado múltiples auditorías para garantizar la transparencia del proceso. Sin embargo, el informe de la UCO ha puesto en una posición complicada al ex ministro José Luis Ábalos, quien también está siendo investigado por su posible papel en el rescate de Air Europa.
Begoña Gómez no solo está en el centro de esta controversia, sino que también enfrenta una investigación en otra causa judicial que lleva el juez Juan Carlos Peinado, quien la ha imputado por corrupción y tráfico de influencias. Este contexto ha llevado a muchos a cuestionar la relación entre las investigaciones y el rescate de Air Europa, lo que podría complicar aún más la situación para la pareja presidencial.
El caso ha generado un intenso debate en el ámbito político, con el Partido Popular (PP) aprovechando la oportunidad para criticar al Gobierno y cuestionar la integridad de Sánchez y Gómez. La oposición ha señalado que la mención de Begoña en el informe de la UCO es un indicio de que podría haber existido una gestión irregular en el rescate de la aerolínea, lo que ha llevado a un aumento de la presión sobre el Gobierno.
A pesar de las acusaciones y la atención mediática, Sánchez ha mantenido su postura de defensa hacia su esposa, reiterando que no hay pruebas que sustenten las acusaciones en su contra. La situación ha puesto de relieve la tensión entre la política y la justicia en España, donde las investigaciones judiciales a menudo se entrelazan con la actividad política, generando un clima de incertidumbre y desconfianza.
El futuro de Begoña Gómez y su relación con el caso de Air Europa sigue siendo incierto, y la presión sobre el Gobierno podría aumentar a medida que se desarrollen las investigaciones. Mientras tanto, Sánchez continúa su gira internacional, enfrentando preguntas difíciles sobre la situación en casa y defendiendo la integridad de su familia ante las acusaciones que han surgido en los últimos días.